Icono del sitio Pequeño Cerdo Capitalista

¿Me conviene contratar a una wedding planner?

Estamos en el mes más cursi del año y quizás muchos ya se están encaminando al altar. Si están por casarse es posible que les haya surgido la pregunta de si les conviene contratar a una wedding planner para que la boda salga como la han soñado.

Les puedo decir por experiencia que organizar una boda se parece más complejo y temerario de lo que es. Lo más difícil -fuera de conseguir al novio o la novia- son el tema del lugar y el vestido. Ya después de eso todo fluye. En el caso de boda religiosa puede ser más tema si no están bautizados, confesados o alguna de esas cosas y puede tomar más tiempo, pero tampoco es misión imposible.

La cosa es que como nunca te has casado puede verse como una enorme maraña de pendientes por la que nadie sabe por dónde empezar, pero cuando pase seguramente te darás cuenta que no es necesario montar el comité olímpico o de los festejos del bicentenario.

El primer filtro de saber si necesitas una wedding planner depende de cuatro cosas:

  1. Si el banquete o lugar incluye a alguna coordinadora
  2. El tiempo que falte para la boda y el tiempo que tengas para dedicarle (o quieras dedicarle)
  3. Si tienes amigos o amigos que ya se han casado dispuestos a orientar y a ayudar.
  4. La complejidad de la boda. Cualquiera de 150-200 o máximo 250 personas es manejable de organizar pero si quieres la boda de el príncipe William y Kate Middelton como que sí vas a necesitar MUCHA ayuda. Lo mismo si viene mucha gente de fuera, si el lugar requiere cambios o de plano quieres una super-producción de casi casi entrar en caballo blanco.

Siendo muy pero muy honestos: si estás dispuesto o dispuesta a invertirle tiempo, si ya el banquete tiene coordinadora para el mero día y si en tu bolita ya varios se han casado como una wedding planner no es realmente súper necesaria en mi opinión y experiencia

Quizás no tienes tiempo o te da paz mental tener a alguien que te ayude, en ese caso puede ser útil, pero también depende de que elijas bien y de que venga al caso con tu presupuesto. Abajo te cuento más de esto.

¿Cuáles son las opciones más comunes que ofrece una wedding planner?

 

¿Cuánto tiempo necesitas para organizar una boda?

Depende de la complejidad de la producción y de si es religiosa. Lo estándar para las religiosas es de 1 año a 8 meses si la iglesia es muy concurrida. Para una boda que es solo civil la verdad es que con 6 o 7 meses para apartar la fecha del lugar del banquete, porque lo del juez con unos 4 o 5 meses antes vas perfecto (aunque si quieres adelantarte también está bien).

Una wedding planner brasileña me comentó que para casos urgentes ella había llegado a organizar una boda en 1 o 2 meses, así que aunque ¡qué estrés! de que se puede, se puede.

 

Checklist de qué necesitas para una boda y el orden en el que lo necesitas

Si algo es MUY importante  lo puedes subir en el orden de la lista.

Los do’s y donts  con las wedding planners

 

¿Boda perfecta o boda inolvidable?

No hay bodas perfectas. Sí hay novias -y algunos novios- a los que les acaba dando un ataque de nervios por el estrés de que todo salga como planearon y que sufren porque cada detalle funcione, pero la boda perfecta no existe: Igual y los globos de cantoya no volaron, el maquillaje o peinado duró 30 minutos, se les olvidaron aventar los pétalos a la salida, a la novia se le puede caer el techo al lado de donde la están maquillando y hacerle un hoyo al velo, se les puede barrer dar las notas de agradecimiento, saludar en las mesas o poner las decoraciones que tanto te mataste en buscar, algún familiar se le botó la canica en el proceso y se portó mal contigo…. Todos esos que menciono son casos reales y prueban que  no hay boda 100% perfecta logísticamente hablando y los que te digan lo contrario te mienten o tienen amnesia.

Pero lo curioso es que al menos en mi experiencia lo más importante de una boda no es la perfección sino lo memorable y disfrutable. Meis amigas y amigos me dieron muchos consejos útiles para la logística, pero el mejor para la boda en sí me lo dio mi querido editor David García y me dijo: «trata de estar presente, se pasa muy rápido y es un momento único en el que recibes mucho amor de todos los que te rodean». Yo que no soy la más pinky pinky  puedo decirles que justo eso -y no los caballos blancos o las orquídeas de Sudáfrica- es lo que hace a la boda un día inolvidable y único en nuestras vidas.

El día de la boda, por más inconvenientes que hayan pasado o pasen, concéntrate en estar presente y disfrutar. ¡Que sean muy pero muy felices ese día pero sobre todo los que viene después!

 

Si tienes otras dudas sobre bodas puedes leer:

Salir de la versión móvil