En Twitter me consultaron si es de mala educación preguntar el sueldo y, aunque es un tema que aplica para todo el mundo, creo que es perfecto para el día internacional de la mujer, porque muchas no preguntan para que no las tachen de»interesadas», «materialistas», «caza-fortunas», etcétera… aunque luego ¿cuáles fortunas?, pero eso es harina de otro costal.
Este post es parte de una convocatoria de Roberto Morán, de dinerodinero.mx , quien va a hablar de qué pasa cuando inviertes «como niña». Sigue el mío y después el de Regina Reyes Heroles sobre qué pasa cuando ganas más que tu chico. Pueden leer el resto de los temas de dinero y del día de la mujer en los blogs de los integrantes del clan financiero.
Después de mucha indicación, a lo que nos truje:
Antes de contestar si yo consideraba de mala educación preguntar el sueldo, lo puse a debate con los twitteros. Hubo multiplicidad de reacciones: estaban los que decían que no había problema y los que creían que dependía de la situación; otros aseguraban que era una cuestión de confidencialidad o competitividad en el trabajo o un tema de seguridad de los datos; unos de plano se ofendieron, lo tomaron bien personal y su respuesta fue «pues primero dí tú cuánto ganas», y otros decían que sólo si es con una pareja.
La pregunta de la chica era si era de mala educación porque la gente lo hacía para «mofarse» de otros. Mi respuesta es que cualquier cosa que se pregunte con ese objetivo es de mala educación, independientemente de si es sobre el sueldo o no.
Les voy a poner los tuits, algunos son muy reveladores y otros simpáticos:
Y el que me dio más risa:
Como paréntesis, este post de El Peso Nuestro justo habla de los sueldos reales contra los que la gente dice que gana.
Regresando al tema, que nos alteremos tanto por preguntar o revelar el sueldo tiene que ver con nuestra MALA educación… pero financiera. Al ponernos tan tajante en que «en ningún caso se pregunta», lo convertimos en un tema prohibido, que puede generar otra multiplicidad de problemas como que tampoco se pueda hablar de metas o que se esconda cuando tiene problemas de deudas.
Yo creo que sea o no de mala educación preguntar el sueldo depende del tono, el objetivo y la cercanía de la persona. En qué caso creo yo que sí se puede preguntar el sueldo:
– Búsquedas laborales: si estás por postular a un trabajo o buscas personal para una plaza, puede ser válido porque necesitas conocer el precio del mercado. Si no quieres preguntar directo a alguien en esa posición, pregunta rangos.
– A la pareja: es información muy importante si tienes una relación ya estable y donde se hacen planes, porque al final se necesita saber con qué recursos cuentan. Además habla de la confianza que se tienen. Si no le quieres decir porque crees que te va a botar por roto(a) o porque es una interesado(a) y sólo te quiere clavar el diente, entonces no es un problema de que sea de mala educación o no comentarse el sueldo, sino de que chance estés con la persona equivocada.
– A veces a los amigos o colegas: ahí concuerdo con que depende del propósito y que es una cuestión de seguridad. Si no hay un objetivo válido (para quien lo revela) para saber, esta persona no es tan cercana o pueda comentarlo con terceros, más que sea de buena o mala educación, no es una buena idea. Esto incluye hablar del sueldo o de cualquier otro dato personal.
Ese es justo el punto de por qué era un absurdo que todos se ofendieran por la pregunta o «me la quisieran voltear»: no se trata de publicarla en las redes sociales o decírselo a cualquier persona, pero tampoco irse al extremo de «es secreto de estado», no se le puede decir A NADIE o que en todos los casos lo consideren mala educación.
Hablando de bueno o mala educación, quien sí sabe de protocolo es Renta Roa. Alguna vez ya tuvimos un post compartido sobre las fiestas de fin de año (ella en etiqueta y yo arreglo). Pues justo el miércoles que se armó el borlote con lo del salario era su #MiércolesDeEtiqueta y ella hizo este post sobre lo de preguntar el sueldo.
Les dejo el extracto, pero léanlo completo en su blog:
Como por ahí algunos tuits mencionaron que es contra «las buenas costumbres», también fui a zambullirme en el famoso Manual de Carreño (que es de 1853), a ver qué decía sobre hablar de dinero.
Lo único que encontré, no sé si hay más, fue un extracto del capítulo «De la conversación»:
Es una vulgaridad hablar en sociedad detenidamente de nuestra familia, de nuestra persona, de nuestras enfermedades, de nuestros conflictos, de nuestros negocios y materias puramente profesionales. La persona por ejemplo, que entrase en una tertulia a hacer la historia de una enfermedad, se haría imponderablemente fastidiosa; y el abogado o comerciante que ocupasen la atención de los demás en los asuntos que traen entre manos, o en razonamientos abstractos sobre sus respectivas profesiones, aparecerían además como hombres de pequeños alcances.
Por un lado dice que «en sociedad», no que en familia o con personas cercanas y dice «detenidamente». Si no andas de clavado, hablando horas de eso y lo haces con personas de confianza, en privado (no en reuniones), no habría problema. Conste que estoy siendo condescendiente con quienes lo tomaron de argumento sin haber visto ninguna fuente escrita al respecto.
Creo que a veces confundimos la «profesión de fé» con el conocimiento científico: damos por ciertas, como si fueran datos o hechos, cosas que son creencias, que no sabemos ni de dónde salieron o cuál es su fundamento y que se vale cuestionar. Nuestras creencias sobre lo que se debe o no se debe hacer respecto al dinero, es el ejemplo perfecto.
En twitter mucha gente montó en pantera cuando hice la pregunta de si era de mala educación preguntar el sueldo y si sí, por qué. Mi ánimo no era para ver quién estaba bien o mal, sino simplemente descubrir qué piensan. Lo más gracioso es que muchos decían que estaba mal, pero no si en todos los casos o por qué. Como que la respuesta era «es que así lo dictan las buenas costumbres» ¿pero de dónde sacamos esas costumbres? Muchos mencionaban el manual antes citado, que también contesta «depende».
Creo que hay que ser más inquisitivas e inquisitivos y atreverse a preguntarse porqué hacemos o creemos ciertas cosas. Lo único que puede pasar es que conserves tu idea original, pero más sustentada, o que la cambies por más funcional en tu vida.
Si quieren empezar por hablar de dinero, acá tienen tips para aventarse al ruedo y otros posts para iniciar a la familia o la pareja en el fascinante mundo de las finanzas personales;)
Feliz día de la mujer a todas. Y todos los que estén leyendo no olviden compartir estos posts con mujeres a las que les deseen prosperidad.
P.D Corran a leer el post de Regina, sobre las dinámicas cuando su sueldo es más grande que el de su galán.
Me sorprendió mucho leer que a algunos les crispa los nervios el tema. Creo que para los freelancers es vital preguntar. Acá donde yo vivo (en los blogs de moda) es muy común que una marca se aproxime para comprarte un servicio y te pidan que tú pongas el precio. Lo mejor es ir y preguntarle al vecino cuánto cobra por un servicio similar, así no te vas a los cielos y espantas al cliente ni te bajas y «pasas» a perjudicarte (a ti y al gremio completo, de pasadita). Y si, justamente los que nos preguntamos entre nosotros nos tenemos confianza y sabemos que es para eso.
Y con los novios: preguntarle cuánto gana, en la primera cita, es como preguntarle si hay enfermedades congénitas en su familia. Digo, eventualmente sabrás ambas cosas… si es que planean tener 8 hijos y comprar una casa juntos. Pero si es nomás un cafecito, pues para qué, verdá.
Esta afirmación es la más interesante del post:
“Creo que a veces confundimos la “profesión de fé” con el conocimiento científico: damos por ciertas, como si fueran datos o hechos, cosas que son creencias, que no sabemos ni de dónde salieron o cuál es su fundamento y que se vale cuestionar. Nuestras creencias sobre lo que se debe o no se debe hacer respecto al dinero, es el ejemplo perfecto”.
Se debe cuestionar hasta las figuras de gran autoridad, que muchas veces por ese solo hecho ya ni se duda de su palabra.
Así sean ganadores de premios Nobel en economía, presidentes de Bancos centrales, mentores y editores de revistas de finanzas (Morán), reconocidos maestros o profesores.
Pero desgraciadamente el fomento del espíritu crítico es lo que menos se procura en la educación. Es imperativo que no se conozca ni se cuestione cómo funciona las cosas, porque esto beneficia a los diseñadores de la política.
Saludos.
Esa es una confusión general pero también la de «crítico» con «críticon». Debemos elevar el nivel de las discusiones, cuestionar, pero también con argumentos.
En México creo que pecamos de ambas cosas: falta de espíritu crítico y luego de criticar sin haber investigado. Cuando nos deshagamos de esas dos malas costumbres seremos potencia.
Corrigenda: donde dice «espiritu crítico» debe leerse «pensamiento crítico».
Saludos.
Con temor a ganarme la antipatia de las chicas y chicos aqui presentes, soy del club de aquellos que se guardan para si mismos cuanto ganan. Consejo sabio del abuelo desde joven fue nunca revelar la cifra porque hay que tener un guardadito para imprevistos. Y la sexista connotacion de que ‘si la mujer sabe que ganas veinte, te hara gastar treinta’, ‘no seas codo, viejo’. Pero si le dices que ganas diez, te hara gastar quince, con el subsecuente ahorro. Y nunca revelar el guardadito, para que la susodicha no haga planes con el dinero (yo agregaria ponla como beneficiaria en caso de muerte, pero que no se entere pues puede ‘hacerlo ver como un accidente’.)
Mi abuelo tenia mucho de previsor y era de la escuela de ‘a las mujeres ni todo el amor ni todo el dinero’. Y tuve a mal no seguir su consejo en mi primer matrimonio, en aras de la igualdad y demas. Huelga decir que no me fue nada bien, eh!
De nuevo no creo que tu experiencia tenga que ver con hablar de dinero, probablemente tiene más que ver con la gente con la que andas.
Y «las mujeres» me parece una generalización extrema. Hay mujeres que al revés: si su marido gana 15 quiere que no gaste más de 12 porque hay que guardar para el futuro o que ellas ganan 20 cuando su marido gana 18 o 0, pero en fin, cada quién en el entorno que se educó. Saludos
Buen post!!
Buen artículo!!!
Yo a mi esposa no le puedo ocultar nada, pero ya aprendí que aunque sea un familiar no le puedes tener toda la confianza del mundo.
Un día un primo me pregunto cuanto ganaba, y yo sin pensarlo le dije, tiempo después en una reunión con sus amigos comenzó a «presumir» con ellos cuanto ganaba yo, y ahí ya no me gusto, algunos tienen la boca muy floja cuando no se trata de su seguridad.
Completamente de acuerdo. También es un tema de utilidad: si no sirve de nada que tu primo lo sepa ¿pá qué? y peor si es medio bocafloja. Ahí es regresar al punto de la seguridad.
En lo personal estoy muy de acuerdo con el entorno y la confianza, a mi me ayudó mucho para poder cambiarme de empleo y buscar mejores oportunidades y creo que a mis amigos también.
En mi caso jamás le daría esa información a alguien en quien no confío, pero tampoco me ofendería, no tendría razón, simplemente le diría que no se lo quiero compartir.
Y respecto a los comentarios de Omar Navarro, lejos de ocultar a la pareja las finanzas, es mejor razonar una buena salud en las finanzas y aprender a administrar correctamente lo que se tiene.
Creo que la confianza, seguridad y utilidad combinadas son lo más importante del criterio y claro que es válido no compartir si estos dos no se cumplen. Tanto tú como Botica Pop han dado ejemplos de cómo esa información sí es útil a la hora de buscar trabajo y especialmente para los freelance.
En república Dominicana si no existe mucha confianza no es una pregunta agradable. Es un tema muy relacionado al materialismo de la sociedad en estos días.
Hola Víctor,
Creo que en México es igual, el tema también es ¿para qué quieres o quieren saber?
Gracias por el comentario internacional.
Saludos
Creo que soy el completo extremo de los que no le dicen a sus parejas cuanto ganan. En mi caso en cuanto me depositan mi sueldo/bono/etc se lo paso a una cuenta a mi esposa.
Al principio del año trabajamos en conjunto con un presupuesto y planeamos que queremos hacer ese año (comprar casa, irnos de vacs, tener un bebe, etc). Sobre ese presupuesto, ella lo administra; básicamente porque ella es más disciplinada en ese aspecto.
En mi caso, esto me ha servido para que ella tome consciencia de que si quiere comprar x cosa (una bolsa de 20k p ej) lo puede hacer, pero eso implica no alcanzar cierta meta que nos propusimos como pareja.
Cabe mencionar que quizás tmb lo que nos ayuda es q los niveles de total comp son muy parecidos y que en ese sentido hay muy poca envidia de cualquiera de las dos partes y sobre todo se percibe que ambos aportamos de manera equitativa…
Hola!!!
Creo que la pregunta. Es buena o mala educación preguntar por el sueldo.? No es mala ni bueno, sino todo lo contrario.
A que me refiero «Se le pregunta acerca del sexo?? o Se le pregunta al compañero u amigo el tamaño de su miembro?? No. Por que es cultural en nuestra cultura esta mal visto hacer preguntas tan personales. OJO: El que sea mal visto por la sociedad no quiere decir que sea malo.
A compañeros y amigos yo les hago esa pregunta. No por chismoso ni por patán mal educación. Mas bien para darme cuenta del valor del trabajo en México. Y el valor de trabajo propio. De que otra forma se sabría si es justo nuestro salario a nuestro trabajo.