¿Se acuerdan que hace unas semanas les decía que tuvieran cuidado con el tema de inversiones en crowdfunding (plataformas de fondeo colectivo) porque aún no estaba regulado? Pues al parecer ya surgió la primera estafa del sector: el fraude de Foodies.
Foodies era un proyecto de entrega de insumos para restaurantes que hizo «equity crowdfunding», es decir, vendió acciones para levantar capital, a través de la plataforma colectiva Fondeadora.
Fondeadora en un principio se dedicaba al crowdfunding de recompensas pero de manera cerrada también le empezó a entrar a equity.
Justamente por ser un sector nuevo, porque aún no se contaban con regulación para proteger al inversionista, definir cuáles son los títulos adecuados que protejan sus inversiones y cómo manejar esta captación de dinero para que nadie huya con él, en México no está permitido andar levantando capital públicamente.
En México sólo pueden invertir en capital de riesgo inversionistas calificados, que puedan hacer un análisis a fondo de la empresa y cuya inversión no represente un gran porcentaje de su patrimonio, por el riesgo que conlleva.
Teóricamente Hacienda iba a sacar la regulación para las empresas de crowdfunding en septiembre u octubre de este año, ahora la aplazó hasta 2017 pero pues la realidad los alcanzó: Foodies levantó casi 1 millón de pesos por medio de equity crowdfunding y luego se les desapareció a los inversionistas, de acuerdo con esta nota de Expansión.
Las empresas de crowdfunding y muchas de #fintech no son instituciones financieras y aún no hay reglas de qué vehículos deben utilizar cuando reciben dinero de los inversionistas para que la operación sea transparente (algunas le han sacado la vuelta utilizando mecanismos de prepago y otras proponen fideicomisos), tampoco hay contratos, títulos de crédito u otros documentos legales estándar para los inversionistas.
Todas las inversiones tienen un riesgo, pero es muy distinto saber que puedes perder tu dinero si el negocio falla, que si alguien desaparece con tu inversión, como el fraude de Foodies. Para evitar este tipo de incidentes es mejor esperar a que salgan las reglas y sepas cómo va a estar protegido tu dinero o si le quieres entrar que sepas cuál es el esquema legal que te protege. Papelito habla.
El caso es una pena porque realmente hay empresas buenas que pueden encontrar en el equity crowdfunding una fuente de financiamiento e inversionistas que podrían diversificar su portafolio (solo una parte) para buscar mejores rendimientos, pero esto genera mucha desconfianza.
Por otro lado Fondeadora en su parte de recompensas ha tenido proyectos increíbles y quizás si aún no tenían la infraestructura legal y mecanismos de control que protegiera a los inversionistas no debieron entrarle a equity aún.
Espero que ustedes no hayan sido de los afectados, pero si sí, en un post de medium el director de Fondeadora dijo que ya presentaron una denuncia contra Foodies, que colaborarán con las autoridades y ofrecerán asesoría legal y apoyo a los inversionistas en dicho proyecto.
Si tienen más información del caso por favor compártanla para mantener al tanto a la comunidad de Pequeño Cerdo Capitalista y ¡cuiden su dinero!